“Gracias a IMO Grupo Miranza, he ganado en autonomía y libertad”

Entrevistamos a Susana Mangut, paciente de IMO Grupo Miranza desde hace cerca de 3 décadas.

Te la presentamos:

• Susana es de Cáceres, está casada y tiene dos hijos.
• Es invidente del ojo derecho por glaucoma congénito. En el izquierdo, ha tenido que someterse a dos trasplantes de córnea en nuestra clínica de Barcelona.
• Compagina su trabajo como vendedora de cupones de la ONCE con el periodismo.

Y nos habla de discapacidad visual, periodismo y mucho más. ¡No te pierdas lo que nos explica!

El primer trasplante

¿Cuándo llegaste a IMO?

¡Fue hace mucho tiempo! En el año 1998, cuando aún no existían las redes sociales, mi padre descubrió que abría una clínica en Barcelona, el Instituto de Microcirugía Ocular. Vinimos con muchísima ilusión para llevar a cabo un trasplante de córnea en mi ojo izquierdo.

De niña, con 6 años, habían rechazado el trasplante en otros centros, había pasado por muchas clínicas… y, finalmente, conocí al Dr. José Luis Güell. ¡Fue un “oasis” en nuestro particular desierto!

Quiero destacar su talante, fue muy optimista y positivo desde el primer momento. Y todo salió bien; se pudo realizar el trasplante, con una mejora importante en mi visión.

El trasplante de córnea es el tipo de trasplante más realizado en España. Consiste en sustituir una córnea enferma o dañada por una sana procedente de un donante.

Una vocación: el periodismo

Y, además, fue en un momento importante, ¿verdad?

Sí, tenía 18 años, acababa de hacer la selectividad y empezaba la carrera de periodismo. ¡Y fue como empezar una nueva etapa en mi vida, con mucha más luz (nunca mejor dicho)!

Para leer, siempre he usado el sistema braille. Pero ganar un poco más de visión fue de gran ayuda para desenvolverme, moverme, sentirme más segura… Por ejemplo, dejé de usar bastón al pisar la universidad.

¿Y en qué medio te has sentido más cómoda?

Yo soy una mujer de radio, un medio mágico, que depende de nuestra voz. Y dónde, paradójicamente, yo, que tengo baja visión, puedo contar y describir lo que puedo llegar a ver a personas ciegas.

Y, actualmente, colaboro en un programa de televisión. Trabajo como reportera y, obviamente, el espectador es plenamente consciente de mi discapacidad visual.

Y os acaban de dar un premio…

Sí, la ONCE nos acaba de dar un premio a la inclusión. En mi caso, como trabajo de reportera, en la calle, me ayudan mis compañeros y también en las personas que entrevisto.

El segundo trasplante

Este año, has vuelto a IMO Grupo Miranza. ¿Cómo ha sido el regreso?

Siempre he ido viniendo para revisiones. Sin embargo, a principios de año tuve que afrontar un nuevo trasplante con el Dr. Güell.

El quirófano lo noté un poco más grande (risas). Pero hay algo que era exactamente igual: las voces del Dr. Güell, de la anestesista Montserrat Gibert…las reconocí porque la primera operación cambió mi vida, fue un antes y un después.

¿Y cómo ha ido esta operación?

La técnica ha cambiado (en esta ocasión, fue un trasplante de membrana amniótica). La intervención fue más rápida e indolora y la evolución algo más lenta.

Pero tras la operación, la mejora en mi calidad de vida y de visión ha sido importante. Y lo noto en mis actividades cotidianas. Por ejemplo, ahora veo con más claridad los semáforos antes de llegar a los cruces, puedo pasear o correr sola, sin depender de nadie, veo mejor las caras… ¡también veo las películas en el cine con más claridad!

Con mi nueva vista, a veces pienso: “anda, cómo han arreglado la luz en esta calle, que antes era tan oscura y apenas podía distinguir los escalones”. Pero mi cerebro recapitula y pienso, “no, soy yo la que ahora veo mejor lo que siempre ha estado así“. Es una sensación muy extraña, parece que todo lo hayan pintado y arreglado para mí (risas).

El trasplante de membrana amniótica consiste en la aplicación de un fragmento de membrana amniótica sobre la superficie ocular. Requiere de cirujanos expertos en la reconstrucción con este tipo de tejidos.

¿Quieres destacar algo más?

Sí, que para mí este paso adelante es muy importante. Yo solo tengo mi ojo izquierdo, antes de la operación me planteaba: ¿y si sale mal y dejo de ver?

Pero ha ido muy bien y he ganado visión. Yo que soy una disfrutona de la vida y me gusta moverme, conocer gente… agradezco mucho al Dr. Güell y a su equipo el trabajo que han hecho.

¡Muchas gracias, Susana!